FUE EL ÚLTIMO TRUCO DE MAGIA

A lo largo de su carrera siempre fue considerado como un modesto jugador. Por este motivo nunca estuvo en boca de todos. Pero esta vez, Fabrice Santoro, se convierte en todo un protagonista y no precisamente por los resultados tenísticos que obtuvo en veinte años de carrera, sino por haberse convertido en el primer jugador de la historia en jugar al tenis en cuatro décadas distintas.
De muy joven, el galo incursionaba en el mundo de este deporte allá por el año 1989, año en el cual Guillermo Vilas se encontraba quemando sus últimos cartuchos en el circuito mundial (el argentino abandonó la actividad en 1992). El fin de su carrera deportiva, en un principio, se daba el ocho de noviembre del 2009, a los 36 años, en el Master 1000 de París, capital de su país, tras caer frente al norteamericano James Blake por la primera ronda. Pero el quería establecer el record de ser el primero en jugar por cuatro décadas consecutivas, no se conformaba con ser el jugador que más torneos de Grand Slam disputó, un total de 70, seguido por los 61 de André Agassi, por eso, la organización del primer Grand Slam del año, le otorgó un Wild Card para jugar. Rápidamente, la carrera del francés llegó nuevamente a su fin, y esta vez parece ser definitivo. En su primer encuentro perdió frente al croata Marin Cilic en sets corridos. Este pequeño de 1.75 mts, rápido, hábil de manos, abandona la actividad dejando otra perlita interesante para recordar: en el Torneo de Roland Garros de 2004 Santoro venció a Arnaud Clément por 4-6, 3-6, 7-6, 6-3 y 16-14, en 6 horas y 33 minutos. Se trató (a mayo del 2009) del partido más extenso en la era profesional del tenis masculino.
En lo que respecta a resultados tenísticos, cabe mencionar que el francés el seis de agosto del año 2001, obtuvo su mejor posicionamiento en el ránking (Nº17). Ganó seis títulos en la modalidad single (Lyon, Marsella, Doha, Dubai y Newport en dos oportunidades). En la modalidad de dobles le fue bastante mejor: 24 títulos, entre los cuales se incluye el abierto de Australia en dos oportunidades y el torneo de Maestros en una.

¿Por qué a lo largo de su carrera lo denominaron “El Mago”?

Fue apodado como “El Mago” por la forma poco ortodoxa que tenía de jugar. Desde sus inicios en el tenis, ha tenido vasta libertad de crear su juego y hábitos tenísticos. A Fabrice ser diestro no le impidió, por ejemplo, convertirse en zurdo a lo largo de un punto. Santoro, al iniciar un punto, era totalmente diestro, y tanto su drive como su revés eran a dos manos. Pero, durante un punto, cuando tenía que realizar un golpe supuestamente de drive, se preparaba como si fuera un diestro a dos manos (con la mano derecha en la parte baja del grip, y la izquierda en la alta), realizaba el golpe de esta manera, pero en el resto del trayecto de la raqueta, Santoro convertía un drive a dos manos en un revés zurdo a una mano. Esto es algo imposible de realizar por un jugador convencional. Esta es una de las razones por su acertado apodo.

DANEL AYESTA (WWW.ELMEJORTENIS.COM/BANQUETEDEPORTIVO.BLOGSPOT.COM